Si un sí o un no pueden cambiar una vida, una historia puede ser contada en pocas palabras
"Un violonchelo muerto de miedo", ¡qué imagen, Belén!Dieciocho palabras y una historia larga que me llevo. Un abrazo,
Gracias, Pedro!Un abrazo.
Ya, ya, el violonchello. Hermoso.
jajaja, sí, sí, el violonchelo, el violonchelo...Gracias, Cybrghost.
Me gusta mucho esa humanización del violonchello, entre otras cosas porque un cello se parece a una mujer,no?
Sí, eso dicen, lo mismo que de la guitarra. Más motivos para experimentar sentimientos de manera desbordante... Un abrazo, Atticus.
Me encanta este blog, su estilo, su color, su voz. Buen trabajo
Muchas gracias!Un abrazo.
"Un violonchelo muerto de miedo", ¡qué imagen, Belén!
ResponderEliminarDieciocho palabras y una historia larga que me llevo.
Un abrazo,
Gracias, Pedro!
ResponderEliminarUn abrazo.
Ya, ya, el violonchello. Hermoso.
ResponderEliminarjajaja, sí, sí, el violonchelo, el violonchelo...
ResponderEliminarGracias, Cybrghost.
Me gusta mucho esa humanización del violonchello, entre otras cosas porque un cello se parece a una mujer,no?
ResponderEliminarSí, eso dicen, lo mismo que de la guitarra. Más motivos para experimentar sentimientos de manera desbordante...
ResponderEliminarUn abrazo, Atticus.
Me encanta este blog, su estilo, su color, su voz. Buen trabajo
ResponderEliminarMuchas gracias!
EliminarUn abrazo.