Si un sí o un no pueden cambiar una vida, una historia puede ser contada en pocas palabras
Cómo siempre, le das ese tono inquietante y misterioso que me encanta, un placer leerte, besos!
Es que con tan pocas palabras, no hay otra manera, lo de concretar no me sale, jajaja. No, hablando en serio: muchas gracias.Un abrazo.
Muy bien, Belén, esto pasa más de lo que nos creemos, por una u otra razón.Un abrazo
Gracias, Ana! Sí, en realidad el número de variantes es infinito... Ésta es "una de tantas" :o)Un abrazo.
Uno de los muchos efectos del amor recién estrenado, Belén; aunque también suele suceder si el o la que acompaña es el o la amante y no la pareja oficial. :-)Brillante, como siempre.Un abrazo,
jajaja, sí, también... :o)Un abrazo, Pedro.
Probablemente los que más se observaban eran ellos mismos. Aunque bueno, aquí en La Palma... jajaAbrazos
En La Palma... es lo normal :o) No, bueno, seguro que es lo que tú dices, desde dentro se percibe todo de manera muy diferente.Un besote, Su.
Cómo siempre, le das ese tono inquietante y misterioso que me encanta, un placer leerte, besos!
ResponderEliminarEs que con tan pocas palabras, no hay otra manera, lo de concretar no me sale, jajaja. No, hablando en serio: muchas gracias.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muy bien, Belén, esto pasa más de lo que nos creemos, por una u otra razón.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias, Ana! Sí, en realidad el número de variantes es infinito... Ésta es "una de tantas" :o)
ResponderEliminarUn abrazo.
Uno de los muchos efectos del amor recién estrenado, Belén; aunque también suele suceder si el o la que acompaña es el o la amante y no la pareja oficial. :-)
ResponderEliminarBrillante, como siempre.
Un abrazo,
jajaja, sí, también... :o)
ResponderEliminarUn abrazo, Pedro.
Probablemente los que más se observaban eran ellos mismos.
ResponderEliminarAunque bueno, aquí en La Palma... jaja
Abrazos
En La Palma... es lo normal :o) No, bueno, seguro que es lo que tú dices, desde dentro se percibe todo de manera muy diferente.
EliminarUn besote, Su.